28 de noviembre de 2016 ocurría uno de las mayores tragedias en el fútbol con el accidente de Chapecoense en su vuelo a Colombia.
En las horas de la madrugada del 28 de noviembre de 2016 ocurrió una verdadera tragedia con el vuelo 2933 que iba con destino a Medellín y que se estrelló en las montañas del Cerro Gordo, cercano a la ‘ciudad de la eterna primavera’. En este vuelo se encontraban precisamente todos los jugadores de Chapeconese que iban con la ilusión de jugar la final de al Copa Sudamericana frente a Atlético Nacional.
La escuadra brasileña se estrenaba en la ‘otra mitad de la gloria’ y tras una extraordinaria campaña en la que dejó a grandes rivales de Argentina como San Lorenzo e Independiente, consiguió llegar a la gran final del certamen, en donde ya lo estaba esperando Nacional.
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El cuadro ‘verdolaga’ auspiciaría como local en el partido de ida el 30 de noviembre y la vuelta se cerraría en Brasil el 7 de diciembre. Sin embargo estos partidos no se pudieron jugar luego de haberse confirmado que la nave se había desplomado en el sector de cerro gordo, en inmediaciones de la Unión, accidente que cobró la vida de 71 personas, la mayoría de ellas pertenecientes al club brasilero.
A pesar de las lluvias intensas y el descenso de la temperatura, lo cual dificultaba el panorama, el trágico final tuvo como causa problemas con el combustible, un factor que resultó ser recurrente para la aerolínea conocida como LaMía. El piloto, Miguel Quiroga, había reportado previamente que el avión no tenía suficiente combustible para finalizar el viaje, pero la orden fue continuar.
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VUELO 2933: ‘Lima Mike India dos nueve tres tres dos uno cero en acercamiento y solicitamos prioridad para la aproximación … se nos ha presentado un problema de combustible’
Un auténtico milagro ocurrió en esta tragedia con a penas seis sobrevivientes, el periodista Rafael Hénzel y los auxiliares de vuelo Erwin Tumiri y Ximena Suárez. Además de algunos futbolistas, Alan Ruschel, Jackson Follmann y Hélio Neto, quienes se coronaron campeones de la Copa Sudamericana y alzaron el trofeo luego de que Atlético Nacional les cediera el título y les rindiera homenaje en el Estadio Atanasio Girardot.